Esta receta la comencé a hacer en mi casa para mi hijo Benjamin cuando estaba pequeño. Les cuento que a el de bebe le encantaba la remolacha, pero si tienes bebes han de saber que todos pasan por esa etapa donde se aburren de los sabores y comienzan a necesitar nuevas recetas, bueno por esas épocas surgió esta receta que hasta el día de hoy, aún cuando ya no le gusta la remolacha en ninguna de sus otras presentaciones sigue amando estos Pancakes. Si no eres amante de la remolacha, no te preocupes, créeme yo tampoco soy su mayor fan, pero te puedo decir que esta receta es una verdadera delicia y te aporta muchos de los beneficios del vegetal sin que notes su sabor.
Ingredientes:
* 1 remolacha entera
* 1 taza de avena mosh
* 1/2 taza de leche
* 2 huevos
* endulzante al gusto
* esencia de vainilla
* 1/2 taza del agua de la remolacha cocida
Procedimiento:
1. Cocina la remolacha en agua, deja la cáscara porque está le dará más sabor y color a tus Pancakes.
2. Lleva la remolacha cocida con 1/2 taza de agua en la que se cocinó a la licuadora.
3. Agrega la avena, leche, huevos, endulzante y esencia de vainilla.
4. Deja reposar la mezcla por cinco minutos (este paso es importante siempre que prepares mezclas para Pancakes o waffles para que la mezcla agarre bien, no te lo saltes) y llévala al sartén a cocinar por lado y lado con un poco de aceite de oliva o pam.
5. Sirve como más te guste. A nosotros nos gusta servirla con monk fruit tipo azucar glass, un poco de granola (ya te compartí la receta en el blog) y miel pero puedes ser más creativa en casa y agregar alguna jalea casera o yogurt griego y frutas.
En mi casa nos encanta esta receta y también variamos la remolacha por otros ingredientes como la zanahoria, espinaca o camote. Es una forma muy practica de incluir vegetales en la alimentación de tus hijos y en la tuya también. ¿Además, quien no ama desayunar pancakes?